Con sentimientos de agradecimiento, Yenny Peralta, residente de Batey Amina, Valverde, nos abrió las puertas de su casa para contarnos la situación de emergencia que vivió.

Un día, al salir de su baño tuvo una caída, producto de un derrame. “No me sentía bien, todo se me puso negro y caí”, expresa. Continuó contando que su hija llamó al 9-1-1 para que fueran en auxilio de su madre.

Lo gratificante de esta historia es que Yenny recibió una unidad de ambulancia en menos de 10 minutos, donde un personal altamente capacitado le atendió con excelencia. “Me siento muy agradecida, porque el 9-1-1 llegó de inmediato. Le pido al presidente que siga fortaleciendo este servicio, porque uno es pobre y muchas veces no tiene para un taxi”. Así valora la atención prehospitalaria recibida por el Sistema Nacional de Atención a Emergencias y Seguridad 9-1-1.