Nos trasladamos hacia la provincia Ocoa, específicamente a la comunidad de Mesa de Domingo, donde reside Juan Minyety, un señor que se dedica a la agricultura y disfruta de sus cultivos en medio de la naturaleza que abraza esta zona.

Un día, mientras subía a una mata de aguacate, la rama que lo sostenía se rompió, y desafortunadamente él cayó al suelo, en ese momento nos relata: “Perdí el conocimiento, caí desmayado. Una hermana mía vino y llamó al 9-1-1 y de una vez le dieron para acá”.

Caso de éxito

Su hermana nos contó que el acceso al lugar donde vive Juan es muy difícil: “Cuando llueve los arroyos tienden a desbordarse y se dificulta bastante. Activé el Sistema y de una vez acudieron a brindarnos el servicio en el menor tiempo, pensé que por la distancia y los kilómetros para llegar a esta comunidad se iban a tardar más”.

Juan se siente más tranquilo y seguro al saber que este servicio de atención a las emergencias es efectivo, y con satisfacción hacia el Sistema 9-1-1 consideró: “Hay que agradecerles porque uno se pone malo y al momento está en un hospital, hubiese sido en otro tiempo y la gente pasa trabajo. Esto ha sido una bendición para todos”.